La independencia del Perú fue resultado de un largo proceso que empezó con el grito de libertad de Francisco Antonio de Zela en Tacna el 20 de junio de 1811. Cuando Túpac Amaru II se rebeló en Tinta en 1780 ante los abusos coloniales, Zela tenía 12 años. Su gesta y horrible muerte, la de su esposa Micaela Bastidas y sus hijos, pudo haber moldeado su convencimiento de que el Perú debía ser independiente.
En 2011, perdimos la oportunidad de celebrar por todo lo alto el bicentenario de la gesta de Zela a quien siguieron Pallardelli, Crespo y Castillo, los Hermanos Angulo y Pumacahua y otros levantamientos en el interior, previos a 1821.
La proclama de la independencia fue un hecho notable por su simbolismo y el surgimiento de nuevas instituciones republicanas como el congreso, el primer presidente, la primera unidad formal del ejército, etc., aun cuando el naciente Estado seguía ocupado por fuerzas extranjeras y en lugares lejanos imperaba el orden realista. Las batallas de Junín y Ayacucho de 1824 sellaron el proceso independentista.
La participación extranjera en nuestra independencia fue importante dado que fue el Perú un centro reforzado de la colonia. De Lima salían expediciones y desde Lima se gobernó más de media Sudamérica por mucho tiempo. San Martín y Bolívar merecen todo reconocimiento pero no podemos difuminar las gestas internas de quienes diseminaron semillas de libertad bajo riesgo total e inferioridad de condiciones.
Los romanos instituyeron el título de Pater Patriae para personajes vitales en su supervivencia y crecimiento. Padres de la Patria hay en todo el mundo: Hidalgo en México, Artigas en Uruguay, De Céspedes en Cuba, O´Higgins en Chile, Nariño en Colombia, Gandhi en India, Washington en EE.UU. Republica Dominicana tienen una triada. ¿Quién o quienes son los peruanos Padres de nuestra Patria? Tenerlo, tiene profundo significado sicológico en la construcción de patria, identidad y ciudadanía, aspectos al que le damos relativa importancia.
Vamos a celebrar el bicentenario de la proclamación de la independencia y el Congreso nombró una Comisión Especial Conmemorativa del Bicentenario de la Independencia del Perú con gran amplitud temporal. Crucemos el 2021 con un Padre de la Patria que encarne y transmita valores de patriotismo, identidad y sacrificio por el bien común. Un guía nacional en la construcción espiritual continua de nación y patria.
Si luego de la vida, la libertad es el bien más preciado, muchos peruanos entregaron la suya por la libertad de todos. Honrar honra, honremos y aprovechemos su legado. El reto es para la Comisión que lidera Juan Sheput.
Y por cierto, no llamemos Padres de la Patria a congresistas en una generalización con poco sentido común.